De la caoba se obtiene una madera de finos acabados, trabajabilidad y durabilidad, y es considerada la mejor madera para ebanistería. Es quizás la primera madera tropical que se extendió por Europa y fue muy apreciada por su belleza y resistencia. Actualmente, es más su valor histórico que su valor comercial. Las más utilizadas como madera son Swietenia Machrophylla, Swietenia Mahagony y Swietenia Humilis.
Notas históricas
La caoba es una de las maderas más utilizadas a lo largo de toda la historia del mueble. Normalmente, se ha usado en mobiliario de cierto nivel social, ya que se trata de una madera considerada exótica y de importación. La más apreciada fue la del Caribe –Cuba, Jamaica, Puerto Rico y Santo Domingo–, con un color profundo y adecuada tanto en macizo como en chapeado (RODRÍGUEZ 2006: 93).
Según menciona Sofía Rodríguez Bernis, en su Diccionario de mobiliario, la caoba se importó en los inicios para la construcción. A finales del siglo XVI aparece en las obras del Alcázar de Madrid, donde parece que se reservó madera de caoba para construir un bufete tocador para el rey Felipe II. Además, aparece empleada en una librería construida en 1592 (RODRÍGUEZ 2006: 93).
En 1562, para la fabricación de las librerías de la Biblioteca del Monasterio de El Escorial, realizadas por Giuseppe Flecha, según menciona el arquitecto renacentista Juan de Herrera, se hizo una cuidada selección de maderas para disponerlas con un rigor geométrico perfecto. Las maderas preciosas y exóticas que se emplearon para la construcción de las librerías eran la caoba, la balata, el ébano, el naranjo y el cedro (CASTELLANOS 1990: 85-86).
Según apunta Mainar, durante el siglo XVII la caoba se empleó en las molduras talladas y doradas de los marcos de alcoba de las casas acomodadas. Por otra parte, a las islas Baleares también llegó la caoba y se usó con cierta frecuencia en este período, junto con otros materiales lujosos como el ébano, el palisandro o el carey, además de combinarla con técnicas lujosas, como la del vidrio pintado al óleo, propia de Nápoles y que en las islas se desarrolló bastante (PIERA 2015).
A lo largo del siglo XVIII se pierde la preferencia por el ébano y se utiliza la caoba, considerada un material exótico y valioso. Este cambio de mentalidad se da paralelamente en toda Europa, especialmente en Inglaterra, donde ya desde el segundo cuarto del siglo la caoba comienza a utilizarse frecuentemente en los muebles de lujo. En Inglaterra se pone de moda a partir de 1720, cuando se eliminan los gravámenes sobre la importación de las maderas de las colonias, como la caoba (RODRÍGUEZ 2006: 93). El gusto por el acabado de la caoba barnizada se había extendido por toda Europa y fue especialmente usado en los muebles de Chippendale, que tuvieron mucha influencia en España y el resto de Europa (MAINAR 1976: 170). Inglaterra crea un precedente que tendrá una gran influencia en Cataluña y a menudo, cuando no era posible adquirir caoba, los ebanistas y carpinteros catalanes empleaban el almagre o el conocido tinte de alemana para teñir madera de álamo blanco, de olmo o de arce de color caoba. Solo en los casos de las casas acomodadas de Barcelona encontramos muebles de caoba, piezas muy costosas que, cuando no era posible permitirse una pieza de caoba, se sustituía por muebles de nogal, que tiene un color parecido (MESTRES; PIERA 1999: 124).
Durante el siglo XVIII, los ebanistas franceses cubrían las estructuras de los muebles que construían los menuisiers con paneles de marquetería de maderas exóticas, entre ellas la caoba (SOUCHAL 1963: 14).
En Cataluña la caoba entra con fuerza con las marqueterías del estilo Directorio e Imperio (alrededor de 1800) aplicadas, frecuentemente, en las cómodas (MAINAR 1976: 187 y 192). Las marqueterías se realizan con madera de nogal, caoba, ébano o boj, pero también se aplican filetes de marquetería sobre base de caoba (MAINAR 1976: 196-197). Normalmente en este período la caoba se aplica en chapas y no en macizo.
Desde principios del siglo XIX, el estilo Imperio francés fue la referencia para la ebanistería catalana. La influencia francesa fue importante en la manufactura de mobiliario catalán, hasta el punto de utilizar los mismos materiales, formas y tipologías. Como apunta Piera, la caoba, muy usada en Francia, se introdujo como la madera reina de los chapeados y se empezó a aplicar el mármol en los sobres de los muebles, especialmente de las cómodas (PIERA 2012). Los mejores muebles producidos durante este período fueron de la mano del avance industrial, puesto que para la obtención de las diferentes chapas se utilizaban sierras mecánicas que aportaron regularidad y perfección en el corte. La utilización de maderas exóticas de importación, como la caoba, propició el uso de dichas sierras, con las que se podían hacer chapas más finas y obtener mayor rendimiento de la madera reduciendo los costes en materia prima (PIERA 2012). Sin embargo, durante el cambio de siglo fue habitual la imitación de la caoba en los casos en que los propietarios no podían permitirse una pieza con chapa de caoba. No obstante, a medida que avanzaba el siglo, entre las maderas más apreciadas de la ebanistería catalana se encontraba la caoba. La madera de caoba se aplicaba a todas las tipologías de los muebles e incluso en viviendas de clase media (MESTRES; PIERA 1999: 219).
Gracias a la Exposición Pública de Productos de la Industria Española del año 1844 en Barcelona, podemos saber que la caoba era la madera más utilizada en los muebles presentados (GÜELL 2005: 8 y 9). Entre los años treinta y cuarenta del siglo XIX todavía están muy presentes las formas del Imperio y con ellas los materiales empleados, como la caoba y la chapa de palma de caoba, sobre todo en los frontales de los cajones. Si avanzamos en el siglo y tomamos como referencia otra exposición, la Exposición Industrial y Artística de Productos del Principado de Catalunya del año 1860, vemos que la caoba deja de ser la madera más utilizada y se ubica en un segundo lugar, mientras que el material más usado es la madera de jacaranda, de una tonalidad más oscura que la caoba (GÜELL 2005: 9).
A finales del siglo XIX y durante los años del modernismo, la caoba se sigue empleando en macizo, en marquetería y de imitación tiñendo otras maderas de su tono (MESTRES; PIERA 1999: 267, 273 y 279). Así pues, la caoba se utiliza como una madera para crear contrastes y aportar juegos cromáticos interesantes (MAINAR 1976: 328). Cabe mencionar la puerta de entrada a la Casa Navàs (proyectada por Lluís Domènech i Montaner y decorada por Gaspar Homar) de madera de caoba, realizada por el mueblista Homar (CASA 2006: 125).
Durante los años veinte del siglo XX, durante la época déco los materiales usados en la construcción de mobiliario eran aquellos con efecto embellecedor. Encontramos las maderas exóticas o de importación como el ébano, el ébano de Madagascar, la palma, el palisandro de Brasil, el zebrano o la caoba (GÜELL 2018: 135-137).
Definiciones
Nom científic
Swietenia Macrophylla
Nom comú
Caoba americana, aguano de Tabasco (Es), Caoba americana (Cat), Central America Mahogany, Honduras Mahogany (En), Acajou d'Amérique Centrale (Fr)
Família
Meliaceae
Procedència
América
Distribució geogràfica
Zona oriental de América central y zona tropical de Suramérica
Color
Color de la albura blanquecino o blanco amarillento. Color del duramen, rosado y con el tiempo marrón rojizo. Albura diferenciada. Presenta atractivos veteados. Puede presentar resina de color oscuro o depósitos de color blanco en los poros.
Fibra
Recta y también cruzada.
Gra
De fino a mediano.
Duresa
Intermedia, 2.7 en el test de Chaláis-Meudon pero pueden encontrarse vetas duras de por medio.
Densitat
Semiligera, entre 510-580 kg/m³ (S. Macrophylla).
Durabilitat
Duradera frente a los hongos, buena resistencia al ataque de insectos, pero no a las termitas.
Impregnabilitat
Madera del duramen no impregnable y albura variable desde medianamente impregnable hasta poco impregnable.
Usos
Mobiliario y ebanistería, chapas, recubrimientos decorativos, carpintería interior, ebanistería, tornería, talla, escultura, elementos deportivos, mangos de herramientas, tableros contrachapeados, instrumentos musicales y cajas para fusiles.
Preu/disponibilitat
Muy cara. Actualmente prohibida su tala y venta por considerarse especie en peligro de extinción.
Propietats tecnològiques
● aserrado - fácil. El desgaste de las sierras es normal. Se pueden utilizar sierras de acero
● buenas aptitudes para la obtención de chapas por desenrrollo o por corte a la plana
● mecanizado - sin problemas
● encolado, clavado, atornillado y acabado - sin problemas, aunque pueden producirse cambios de color con el encolado y el acabado con poliéster puede dar problemas
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